Una reflexión directa al corazón

*Cuando atravesé la enfermedad de Encefalomielitis Miálgica, estuve tan pero tan mal, que sinceramente me vi morir muchas veces.

*Mi rostro de apariencia acartonada, mis ojos con sus pupilas tan dilatadas, mi cerebro que se inflamaba y además padeciendo pérdida parcial de la memoria, febrícula constante, se me hinchaban las articulaciones,  no soportaba oír el más mínimo ruido en mis oídos, y así podría enumerar tantos síntomas, dolores y vivencias muy dolorosas. 

*Sé lo que es sentirse muy mal, sé lo que es verse morir, sé la lucha interna que se siente al no poder ocuparte de cuidar a tu familia, sé el dolor profundo que se siente cuando tenés hijos pequeños y sentís que te vas a morir y no los vas a ver más aquí en la tierra. 

*Tantas emociones encontradas, pueden llegar a oprimir nuestra alma, nuestro corazón, nuestra vida y nuestro entorno.

*Pero llega un momento en donde tenemos que hacer un click, es ese ponernos de pie por dentro, en donde tenemos que dejar de mirarnos a nosotros mismos, nuestra situación y nuestra condición, para poner así los ojos en Jesús, (Hebreos 12:2) quién es el autor de la fe.

*Solo Jesús dio su vida en la cruz, por nuestra salvación, vida eterna y sanidad y es a Él a quien debemos recurrir.

*Jesús es la pieza perfecta que calza en nuestro corazón para llenarnos de vida, de paz, de fortaleza, de esperanza, consuelo, salud, etc.

*Jesús es el camino, la verdad y la vida. (Juan 14:6)

*En lo personal, mi sanidad fue un proceso largo, eso no quiere decir que lo tuyo va a ser así. Pero le estoy tan agradecida a Dios, porque llegó un día en el que estuve completamente sana para su gloria. 

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Si nunca recibiste a Jesús en tu corazón te invito a hacer esta oración:

Dios, reconozco que soy pecador, me arrepiento de todos mis pecados y recibo a Jesús como mi Salvador y Señor de mi vida. Anotá mi nombre en el libro de la vida.

Espíritu Santo quiero conocerte, te necesito, amén. 

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Si estás atravesando una enfermedad, vamos a orar:

Dios en el nombre de Jesús te pido por cada persona que está enferma, que tu poder sanador Jesús esté tocando y sanando su vida.

Esperamos en vos un milagro, te damos las gracias por lo que estás haciendo y vas a hacer.

Espíritu Santo que tu presencia esté llenando cada vida y cada familia, amen.

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Mateo 11:28 Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados, y yo les daré descanso.

Vayamos hoy a Jesús y entreguemos todo lo que nos agobia, Él nos ama. 

Con cariño: Tere.

Bendiciones.