DEVOCIONAL DE UN LUNES DE ENERO

Verás llover….
Lluvia temprana y tardía.
Lluvia que riega tu vida.
Y que te lleva a un nuevo amanecer.

Verás llover…
Siempre que mires hacia arriba.
Siempre que tengas fe y esperanza.
Siempre que confíes en Mí, verás llover.

Lluvia que sacia tu sed.
Lluvia de un nuevo amanecer.
Lluvia que riega tu alma.
Y que te hace una nueva mujer.

Ezequiel 34:26 Haré que ellas y los alrededores de mi colina sean una fuente de bendición. Haré caer lluvias de bendición en el tiempo oportuno.(NVI)

No debemos olvidar que somos herederas y coherederas en Cristo Jesús; y que en Él y por Él tenemos bendición.
En este comienzo de semana, abramos nuestro corazón a Dios e invitemos al Espíritu Santo a que inunde de sus ríos nuestra vida.

La lluvia temprana, es la que favorece a la siembra, ya que llega en el momento justo para que la tierra se afloje y así poder sembrar la semilla.
La lluvia tardía, es la que facilita la cosecha, la que da el toque final. La que favorece a la maduración del fruto.
¡Qué necesarias son estas lluvias para el agricultor y qué necesarias son para nosotras en el área espiritual!!

No dejes que las circunstancias que te rodean sequen tu vida. No permitas que tu físico, tu alma, tus emociones, tu espíritu, entren en tierra seca y árida. Sino por el contrario en este día, recurrí en oración al único que puede derramarte lluvias de bendición. Esa lluvia que traerá gozo a tu vida y te llevará a reverdecer en el río del Espíritu de Dios.

Dios tiene planes de bien para vos y los tuyos. Él te ama.

Oremos:
Padre en el nombre de Jesús, te pedimos en este comienzo de semana que la presencia del Espíritu Santo inunde con su lluvia todo nuestro ser.
Renueva nuestra vida, nuestro espíritu y nuestro hogar.
Nos consagramos a Tí, te necesitamos, deseamos ser una nueva mujer, llena de tu paz, de tu amor y de tus renuevos.
En el nombre de Jesús, envía de tu lluvia, porque nosotras tenemos sed de Tí.
Te amamos. Amén.

¡Bendiciones!