Salmos 34:6 Este pobre clamó, y el Señor le oyó y lo libró de todas sus angustias. 7 El ángel del Señor acampa en torno a los que le temen; a su lado está para librarlos. 8 Prueben y vean que el Señor es bueno; dichosos los que en él se refugian. 9 Teman al Señor, ustedes sus santos, pues nada les falta a los que le temen.
¿Por qué digo nos
conviene elegir? Porque en ella encontramos paz para nuestra alma, porque su
Palabra vivifica nuestro espíritu, sana nuestras emociones, sana nuestro físico
y nos aconseja en nuestro diario caminar.
Cada día oremos a Dios, sabiendo que como un Padre amoroso Él nos oye y está presto a responder a nuestra oración.
Pidamos a Dios en el
nombre de Jesús que se lleve todas nuestras angustias, preocupaciones y todo lo
que nos trae temor.
Dejemos que el
Espíritu Santo nos llene de su presencia.
No nos olvidemos que
su protección, refugio y bondad rodean nuestra vida y hogar.
¡Bendiciones!
No hay comentarios:
Publicar un comentario