Te deseo con todo mi corazón, qué Dios te sorprenda con sus maravillas y que aquella petición de tu corazón, sea pronto contestada por Dios.
Hoy en Buenos Aires es un día muy nublado, venimos de unos cuantos días de lluvia. Y aunque estamos en otoño, por momentos el veranito no se quiere ir.
Así que pasamos de frío, a fresquito y luego a caluroso, haciendo que muchas personas se resfríen.
No sé en que parte del mundo te encuentres, me emociona pensar que a muchos kilómetros hay alguien que está leyendo mi blog y mucho más aún, que me escriben alentando mi vida. Me siento bendecida por ustedes y por supuesto agradecida.
Esta mañana estaba meditando en el Salmo 84 y quiero compartir los siguientes versículos:
Salmo 84:2....Mi corazón y mi carne cantan al Dios vivo.
Salmo 84:5 Bienaventurado el hombre que tiene en Ti sus fuerzas, En cuyo corazón están tus caminos.
Para este mes de mayo, te invito que a pesar de cualquier situación, puedas decir..."Señor a pesar de.... yo decido que mi corazón y mi carne te van a alabar y adorar, porque Tú eres el Dios de mi salvación".
Que este mes de mayo, sea para nosotros como el versículo 5, poner nuestras fuerzas en Dios, y guardar cada día sus mandamientos en nuestro corazón y llevarlo por obra. Si encomendamos a Dios nuestro camino y confiamos en Él, Él lo hará.
¡Qué nada ni nadie nos robe el gozo de la salvación, ni la fe y la esperanza de creer que tendremos un mes lleno de la presencia de Dios inundando nuestra vida y hogar!
Padre, en el nombre de Jesús te consagramos este mes de mayo. Te pedimos que tu presencia nos acompañe y guíe. Que podamos ver tus milagros y maravillas, que las señales nos sigan.
Te consagramos a Tí nuestra vida y familia, nos comprometemos como cada día a vivir conforme a tu Palabra, bajo tu voluntad. Teniendo una vida alineada a Tí, en santidad y amor.
Bendice y sana a cada persona enferma, a quienes se encuentran en dificultades, dales por favor el discernimiento y la salida para tener victoria en Cristo Jesús.
Te amamos con todo el corazón, en el nombre de Jesús, amén.
Con cariño: Tere.
¡Qué Dios te bendiga!
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