Hola... me senté a escribir una palabra que Dios había puesto en mi corazón hace unos días atrás. Cada vez que escribo, antes oro, le entrego ese momento a Dios, no quiero ser un estorbo ni un impedimento para el Espíritu Santo.
Y cuando terminé de orar, lo que tenía pensado escribir, se transformó en estas palabras que puso Dios en mi corazón para cada una de nosotras, sus hijas amadas.
Amo el perfume de mis hijas, ese perfume suave y celestial.
Esa fragancia que brota de ...sus vidas, cuando en oración me llaman... "Papá"
Amo la mirada tierna de mis hijas, cuando elevan sus ojos para buscarme a "Mí"
Y me encanta contemplarlas cuando duermen, y así acariciar con mi presencia cada corazón.
Amo contestarle sus peticiones, que sepan que me tienen y que siempre estoy.
Que me busquen cada día con actitud humilde, que me derramen el alma y me entreguen el corazón.
Amo cuando ríen, cuando se sonrojan, cuando no saben qué decir y cuando no paran de hablar.
Amo rodearlas con mi Santo Espíritu y llenarlas de mi aceite, de mi oleo y de mi miel.
Amo a mis hijas con amor eterno, amo rodearlas de mi favor, de mi unción y mi perdón.
Amo ponerles un collar de perlas, vestirlas de lino fino y coronarlas de mi amor.
Y donde esté cada una de ellas, cada vez que me claman, hago para el mundo, solamente para oír la oración que sale de cada corazón.
Y cuando terminé de orar, lo que tenía pensado escribir, se transformó en estas palabras que puso Dios en mi corazón para cada una de nosotras, sus hijas amadas.
Amo el perfume de mis hijas, ese perfume suave y celestial.
Esa fragancia que brota de ...sus vidas, cuando en oración me llaman... "Papá"
Amo la mirada tierna de mis hijas, cuando elevan sus ojos para buscarme a "Mí"
Y me encanta contemplarlas cuando duermen, y así acariciar con mi presencia cada corazón.
Amo contestarle sus peticiones, que sepan que me tienen y que siempre estoy.
Que me busquen cada día con actitud humilde, que me derramen el alma y me entreguen el corazón.
Amo cuando ríen, cuando se sonrojan, cuando no saben qué decir y cuando no paran de hablar.
Amo rodearlas con mi Santo Espíritu y llenarlas de mi aceite, de mi oleo y de mi miel.
Amo a mis hijas con amor eterno, amo rodearlas de mi favor, de mi unción y mi perdón.
Amo ponerles un collar de perlas, vestirlas de lino fino y coronarlas de mi amor.
Y donde esté cada una de ellas, cada vez que me claman, hago para el mundo, solamente para oír la oración que sale de cada corazón.
Isaías 61:10 En gran manera me gozaré en Jehová, mi alma se alegrará en mi Dios; porque me vistió con vestiduras de salvación, me rodeó de manto de justicia, como a novio me atavió, y como a novia adornada con sus joyas.
11 Porque como la tierra produce su renuevo, y como el huerto hace brotar su semilla, así Jehová el Señor hará brotar justicia y alabanza delante de todas las naciones.
11 Porque como la tierra produce su renuevo, y como el huerto hace brotar su semilla, así Jehová el Señor hará brotar justicia y alabanza delante de todas las naciones.
Salmo 17:8 Guárdame como a la niña de tus ojos; Escóndeme bajo la sombra de tus alas,
1 de Juan 4:19 Nosotros le amamos a Él, porque Él nos amó primero.
Con cariño: Tere.
¡Qué Dios te bendiga!
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